Entrevista a Elena González
Hoy tenemos sentada en nuestro cyber-divan a Elena González, biker madrileña más conocida como "La Rubia". Recien llegada del duro desierto de la Gaes Titan Desert by Garmin, nos contará su historia y sus sensaciones.
Una ciclista que reune la mezcla perfecta de amor por el ciclismo y competitividad. Elena disfruta del bendito y a veces poco reconocido deporte del ciclismo. Se le nota en la cara cuando está agusto entrenando y compitiendo. Pero además tiene una preparación física y mental perfecta para poder rendir en todos los terrenos lo que ha llevado a Elena González ha lograr importantes resultados como el Open de España de Ultramaratón y recientemente entrar en el top10 de la Gaes Titan Desert by Garmin.
Después de una Titán muy dura ¿Cómo te encuentras ahora mismo físicamente y mentalmente tras este gran reto?
Los grandes retos requieren siempre grandes compromisos, por eso desde el mismo momento en que decides participar en una prueba tan exigente como la Titan Desert asumes que deberás pasar varios meses de entrenamiento y disciplina en los que sacrificas gran parte de tu tiempo con la familia, los amigos… Pero en la vida todo tiene un precio y la Titan no regala nada.
Todos sabemos que por muy bien preparados que vayamos, vamos a tener momentos muy difíciles tanto físicos como psicológicos, pero yo soy de las que piensan que si crees que puedes, podrás !!!
Han pasado pocos días desde que regresáramos, ahora hay que recuperarse, pero lo cierto es que me encuentro muy bien tanto física como anímicamente para afrontar los retos que están por llegar y como lo que no te mata te hace más fuerte… jijiji… que se preparennn !!!
¿Cómo te lo has tomado? ¿Cómo un desafío o como una carrera?
Soy muy competitiva, no puedo negarlo y este año en mi segunda Titan Desert participaba por primera vez de forma individual.
El nivel en féminas es increíble, van como “un tiro”, por eso me estuve preparando desde el mes de Noviembre para intentar acercarme a las grandes y dejar en la mejor posición posible a Mammoth, mi equipo, el equipo que ha confiado en mí. Pero a menudo el destino decide por nosotros y nos obliga a cambiar de planes...
El primer día me perdí junto con otros 100 corredores, así que lo que tenía que haber sido un estreno de 109 Km se convirtió en una “etapa reina” de 160 km. De golpe me encontré con un lastre de más de tres horas en la general casi imposible de recuperar… En un primer momento te vienes abajo, piensas que has tirado todo el trabajo de meses “por la borda”, pero hay que reponerse y seguir…
Sin dejar de dar lo mejor de mí, según fueron pasando los días y acepté la nueva situación empecé a sentir que la posición en la clasificación general importaba un poquito menos y que el simple hecho de estar allí ya me hacía inmensamente feliz, participar es un privilegio, lo mejor de la Titan es la gente… El compañero y amigo que te echa una mano desinteresada cuando no vas bien, el fisioterapeuta que te mima después de cada etapa, la persona del staff que cada mañana te da un beso en la frente y te abre el grifo del café porque lleva haciéndolo desde el primer día y crees que te dará suerte, el mecánico que te recibe con una sonrisa y un “enhorabuena campeona”, mis compis del alma de entrenamiento y de haima, los titanes que acababan siendo mi grupeta de cada día, aquel que me daba un grito de ánimo en cada Punto de Control y que era una inyección de moral, el amigo que me espera en meta cada día para abrazarme y decirme, porque me quiere, que soy grande… jijiji…
Cuando llegamos el primer día La Titan para mí era una carrera, pero día a día se fue convirtiendo en una experiencia humana inolvidable, y es eso precisamente lo que engancha de la Titan Desert.
¿Ha sido la carrera más dura que has disputado?
Sin ninguna duda: por el kilometraje, el calor, el viento, pero sobre todo por el tipo de terreno, los bancos de arena te machacan y las famosas ondas de las pistas te dejan molido… La Titan es mucha Titan….
¿Cuál ha sido el peor momento?
Han sido dos: uno fue cuando en la primera etapa, tras perdernos, después de 4 horas pedaleando estábamos aun a 15 Km de la salida… Y el segundo fue en el aeropuerto, a la vuelta, se había terminado la Titan y yo odio las despedidas…
¿El próximo año volverás?
Tic Tac, Tic Tac… ;-)
Muchas gracias
Gracias Alfonso, por estar siempre ahí y por tu amor a este deporte. Un besazo!!!
Una ciclista que reune la mezcla perfecta de amor por el ciclismo y competitividad. Elena disfruta del bendito y a veces poco reconocido deporte del ciclismo. Se le nota en la cara cuando está agusto entrenando y compitiendo. Pero además tiene una preparación física y mental perfecta para poder rendir en todos los terrenos lo que ha llevado a Elena González ha lograr importantes resultados como el Open de España de Ultramaratón y recientemente entrar en el top10 de la Gaes Titan Desert by Garmin.
Después de una Titán muy dura ¿Cómo te encuentras ahora mismo físicamente y mentalmente tras este gran reto?
Los grandes retos requieren siempre grandes compromisos, por eso desde el mismo momento en que decides participar en una prueba tan exigente como la Titan Desert asumes que deberás pasar varios meses de entrenamiento y disciplina en los que sacrificas gran parte de tu tiempo con la familia, los amigos… Pero en la vida todo tiene un precio y la Titan no regala nada.
Todos sabemos que por muy bien preparados que vayamos, vamos a tener momentos muy difíciles tanto físicos como psicológicos, pero yo soy de las que piensan que si crees que puedes, podrás !!!
Han pasado pocos días desde que regresáramos, ahora hay que recuperarse, pero lo cierto es que me encuentro muy bien tanto física como anímicamente para afrontar los retos que están por llegar y como lo que no te mata te hace más fuerte… jijiji… que se preparennn !!!
¿Cómo te lo has tomado? ¿Cómo un desafío o como una carrera?
Soy muy competitiva, no puedo negarlo y este año en mi segunda Titan Desert participaba por primera vez de forma individual.
El nivel en féminas es increíble, van como “un tiro”, por eso me estuve preparando desde el mes de Noviembre para intentar acercarme a las grandes y dejar en la mejor posición posible a Mammoth, mi equipo, el equipo que ha confiado en mí. Pero a menudo el destino decide por nosotros y nos obliga a cambiar de planes...
El primer día me perdí junto con otros 100 corredores, así que lo que tenía que haber sido un estreno de 109 Km se convirtió en una “etapa reina” de 160 km. De golpe me encontré con un lastre de más de tres horas en la general casi imposible de recuperar… En un primer momento te vienes abajo, piensas que has tirado todo el trabajo de meses “por la borda”, pero hay que reponerse y seguir…
Sin dejar de dar lo mejor de mí, según fueron pasando los días y acepté la nueva situación empecé a sentir que la posición en la clasificación general importaba un poquito menos y que el simple hecho de estar allí ya me hacía inmensamente feliz, participar es un privilegio, lo mejor de la Titan es la gente… El compañero y amigo que te echa una mano desinteresada cuando no vas bien, el fisioterapeuta que te mima después de cada etapa, la persona del staff que cada mañana te da un beso en la frente y te abre el grifo del café porque lleva haciéndolo desde el primer día y crees que te dará suerte, el mecánico que te recibe con una sonrisa y un “enhorabuena campeona”, mis compis del alma de entrenamiento y de haima, los titanes que acababan siendo mi grupeta de cada día, aquel que me daba un grito de ánimo en cada Punto de Control y que era una inyección de moral, el amigo que me espera en meta cada día para abrazarme y decirme, porque me quiere, que soy grande… jijiji…
Cuando llegamos el primer día La Titan para mí era una carrera, pero día a día se fue convirtiendo en una experiencia humana inolvidable, y es eso precisamente lo que engancha de la Titan Desert.
¿Ha sido la carrera más dura que has disputado?
Sin ninguna duda: por el kilometraje, el calor, el viento, pero sobre todo por el tipo de terreno, los bancos de arena te machacan y las famosas ondas de las pistas te dejan molido… La Titan es mucha Titan….
¿Cuál ha sido el peor momento?
Han sido dos: uno fue cuando en la primera etapa, tras perdernos, después de 4 horas pedaleando estábamos aun a 15 Km de la salida… Y el segundo fue en el aeropuerto, a la vuelta, se había terminado la Titan y yo odio las despedidas…
¿El próximo año volverás?
Tic Tac, Tic Tac… ;-)
Muchas gracias
Gracias Alfonso, por estar siempre ahí y por tu amor a este deporte. Un besazo!!!
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