El ADAMS en la frontera de lo incorrecto

Hace unos días salió a la luz el caso de Chris Froome, uno de los mejores ciclistas de la actualidad, con el sistema ADAMS cuando por un fallo o defecto en el procedimiento no pudo ser sometido a uno de los muchos controles antidopaje que los miembros de la UCI hacen a los ciclistas.

Los ciclistas tienen que informar en todo momento de su paradero con toda clase de detalles y pueden ser sancionados si se saltan o no informan correctamente hasta en un máximo de 3 ocasiones en 18 meses. Chris Froome ya tiene una "falta" por lo que tendrá que tener mucho cuidado estos próximo 18 meses porque sino puede tener un problema como han tenido otros en el pasado.

Las siglas ADAMS significan "Anti-Doping Administration Management System". Vamos a explicarlo más en detalle. ADAMS es un programa o aplicación web de localización que utiliza la UCI, así pueden tener localizados las 24 horas del día, 365 días al año a todos los ciclistas UCI Pro Tour y Profesionales y realizar los diferentes controles sorpresa. En él tienes que especificar tu residencia habitual, así como el hotel donde estas cada día en la competición. O bien el propio ciclista o bien el equipo se encarga de introducir estos datos que tienen que ser permanente revisar para evitar casos como el mencionado de Chris Froome.

Además se tiene que señalar una hora al día, en la cual se tiene que estar aptos para el control y en la dirección que se especifica en el programa. Otro detalle es que los controles se pueden realizar de 7 de la mañana a 23 horas de la noche. Una vez realizado el control antidoping la UCI pasa los datos a la Agencia Mundial Antidoping que se encarga de subirlos a la cuenta personal del ciclista en cuestión donde se pueden ver sus valores de hematocrito, hemoglobina, etc. A partir de ahí, elaboran el llamado pasaporte biológico donde controlan posibles alteraciones hematológicas.

Realmente el objetivo del programa ADAMS es perfecto: una lucha con todos los medios contra los tramposos y contra el doping. Sin embargo parece que las formas y el procedimiento no sólo no es correcto sino que en algunas formas puede llegar a ser "ilegal".  Tal vez ilegal no sea la palabra pero si está en la frontera de lo inmoral ya que de alguna forma este sistema va en contra de los derechos de los ciclistas ya que tienen que exponer a la UCI datos personales sobre su estancia y demás datos que son privados.

Desde el principio los ciclistas han aceptado todo y nunca se han juntado para plantarse e intentar ir por otro camino. Mientras esto no se pare parece que el ADAMS recorrerá el planeta en busca de tramposos entrando en la vida privada de las personas, porque hay que recordar que los ciclistas ante todo son personas.

Uno de esos casos que ocurrió y que sirve de ejemplo para explicar esta falta de humanidad y tacto fue el que tuvo que vivir Kevin Van Impe, cuando fueron al funeral de su hijo, en pleno tanatorio a pasarle un control.